Asturias lidera los planes de igualdad en las empresas

  • Es la comunidad autónoma con mayor porcentaje, el 43,33%, una prueba del papel determinante que están haciendo las delegadas de igualdad, figura pionera en nuestro país, surgida de la concertación regional

El Real Decreto-Ley 6/2019 estableció la obligatoriedad de tener un plan de igualdad a todas las empresas de más de 50 personas trabajadoras (la Ley Orgánica 3/2007 ya obligaba a hacerlo a empresas de más de 250). En nuestro país existen 32.314 que deberían tenerlo. Al finalizar 2022, solo 6.026 contaban con él (el 18,6%). “Así que hay mucho trabajo por delante”, resalta la responsable de Igualdad de CCOO de Asturias.

13/06/2023.
Úrsula Szalata

Úrsula Szalata

La reducción del número de plantilla para obligar a una empresa a tener un plan de igualdad ha multiplicado por seis el volumen de empresas que deben hacerlo, y con ello las demandas empresariales de participación sindical en su negociación, ya que todas las medidas de igualdad deben negociarse, y en su caso acordarse, con la representación legal de las personas trabajadoras. Cuando se aprobó en 2019 el real decreto, CCOO llevaba ya doce años negociando planes de igualdad, lo que nos sirvió para visibilizar la enorme discriminación en los centros de trabajo. Sin embargo, la ausencia de una clara obligatoriedad de registro de los planes hacía imposible cuantificar el alcance del problema.

 En los últimos meses se ha avanzado exponencialmente. Solo en el primer trimestre se han registrado 1.130 planes de igualdad en España (18 en Asturias). Más de un 5% de los planes que hay que hacer en empresas con representación se han registrado en este primer trimestre. Un avance que va más lento (2,9%) en las empresas sin ella (también conocidas como empresas blancas).

En Asturias, de las 360 empresas que deberían tener plan de igualdad, 156 ya contaban con él en el primer trimestre de 2023: 112 de 216 en empresas con plena representación sindical; 8 de 16 con representación parcial; y 36 de 128 en empresas blancas). Con 156 de 360 (el 43,33%) Asturias es comunidad autónoma con mayor porcentaje de planes realizados, muy por delante de Navarra, que es la segunda con el 37,41%, y más que doblando a Madrid (20,01%) y Cataluña (20,39%). 

Asturias se sitúa también a la cabeza en el número de empresas con plena representación sindical que tienen plan de igualdad (el 51,85%, con 112 empresas con plan, frente a 104 sin él) y con representación parcial (el 50,00%, con 8 empresas con plan, frente a otras 8 pendientes de tenerlo).

Aunque desde 2007 es obligatoria la realización de planes de igualdad para las empresas con más de 250 personas en la plantilla, hay menos de un 25% con planes. Asturias (con 100 de 216) es la comunidad autónoma con menos empresas de ese volumen pendientes de tener plan de igualdad: el 53,70%, frente al 62,77% del País Vasco, el 73,36% de Madrid o el 76,77% de Cataluña.

En nuestro país el 76,3% de las personas trabajadoras en empresas de más de 50 personas en plantilla tienen representación sindical. Y, como es lógico, son las empresas con representación sindical las que tienen un mayor porcentaje de planes aprobados, mientras en las empresas blancas la mayoría de las federaciones (salvo Enseñanza y Sanidad) no llegan al 10% las que lo tienen. De los planes registrados, el 37,8% son de empresas de menos de 100 personas en plantilla, el 41,3% de empresas entre 101 y 249 y el 19,9% de las de más de 250.

“Tenemos el mayor porcentaje de planes de igualdad registrados por comunidades autónomas, y esto es una prueba del papel determinante de la figura de las agentes de igualdad, pionera en el país y que surgió de la concertación social de Asturias”, destaca Úrsula Szalata. “Es también prueba de la mejor tradición sindical, la de alcanzar acuerdos para mejorar la vida de las personas. No solo de las mujeres trabajadoras en las empresas, sino también los espacios laborales, con mejores relaciones, de respeto, corresponsabilidad y codecisión”. Para la responsable de Igualdad, “debemos erradicar el acoso sexual y por razón de sexo, no solo por la mala imagen que da la empresa que acaba inspeccionada o en los juzgados, sino porque representa un ataque a la integridad de las mujeres”. Nuestro sindicato se compromete a “seguir trabajando para avanzar hacia la igualdad real y efectiva, y exigiendo la figura de la delegada y el delegado de Igualdad en las empresas”.

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Úrsula Szalata, Igualdad de CCOO de Asturias

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