La importancia de estrechar lazos entre el mundo de la cultura y del trabajo

  • Un repleto Teatro Filarmónica acoge el Acto Cultural por el Trabajo Decente, “por la esperanza, para la mayoría silenciosa que seguirá protestando como siempre”, organizado por las asociaciones culturales en colaboración con los sindicatos

Lo resaltó en Oviedo Unai Sordo al cierre del evento, “estamos recuperando el valor cultural y el valor de la identidad colectiva vinculada al mundo del trabajo”. Y es que, como quedó claro ayer, “una sociedad no puede ser decente sin trabajo decente”. Con emoción y reivindicación tuvieron lugar las intervenciones y actuaciones musicales, llamando a derogar la reforma laboral, eliminar de la vida la precariedad y poner encima de la mesa la dignidad de la clase trabajadora.

24/11/2021.

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Acto Cultural por el Trabajo Decente

Acto Cultural por el Trabajo Decente

 En un tono muy crítico, hasta con cierta ironía con los postulados de las élites conservadoras, los profesionales de la comunicación María Luengo y Pedro Durán presentaron el acto. El dramaturgo Maxi Rodríguez fue el encargado de la lectura del manifiesto conjunto que elaboraron la Ciudadana, la Cultural Gijonesa y Amigos de Mieres, en colaboración con las confederaciones de CCOO y UGT: “En este combate desigual sufrimos un aluvión de mentiras sobre los que vivimos de nuestro trabajo si lo tenemos, sobre nosotros, la mayoría nada silenciosa que seguiremos protestando como siempre”. 

 Las intervenciones comenzaron con Aitana Castaño. La periodista y escritora repasó la historia y alertó de que “si tengo miedo en 2021, que no tendría Anita Sirgo en el 62. Luchar para que el miedo no esté en tu bando. Pertenezco a una generación de precarios”. Pero “se puede hacer otra cosa, se puede derogar esa reforma laboral, nos va a quitar ese miedo”. El siguiente en tomar la palabra fue Daniel Bernabé que resaltó tomando la palabra. El escritor recordó que tenemos “manos que trabajan para buscar la igualdad”. Ahora, “hay que buscar certezas en un terrible contexto incertidumbre; por eso el trabajo decente es tan importante, trabajo decente para la esperanza”. Para concluir recordó que en los momentos tan difíciles de la pandemia los sindicatos estuvieron donde tenían que estar, “ayudando a los trabajadores y trabajadoras”.

Centrando su intervención contra “la precariedad y la miseria”, la escritora Pilar Sánchez Vicente lanzó una pregunta: “¿De qué lado estás, dónde quedó la conciencia, joder? La juventud no es vaga, rechaza los curros de mierda”. Toca unidad para acabar con la reforma laboral que empobrece a la clase trabajadora, “no permitamos que se penalicen las protestas”.

En los saludos que enviaron personalidades del mundo cultural como el cineasta Fernando León, las escritoras Rosa Regás y Marta Sanz, el poeta Benjamín Prado, el documentalista Sebastián Álvaro, el actor Carlos Bardem o el cantante Víctor Manuel hubo un claro compromiso por el trabajo decente “con la cultura impulsando el cambio, derogando la reforma laboral, poniendo las bases de un futuro con justicia social”.

En las actuaciones musicales, con canciones comprometidas, con conciencia, Nuberu y Luis Pastor pusieron su voz por la igualdad, recordando la historia y la barbarie del fascismo. Jerónimo Granda con toque de humor y mucho sarcasmo removió voluntades y levantó las risas del público.

 Tras la intervención de Pepe Álvarez, secretario general de UGT, que insistió en la necesidad de un nuevo contrato social y recordó su época de estudiante de hostelería en el propio Filarmónica, tomó la palabra para cerrar las intervenciones del acto cultural Unai Sordo. El secretario general de la Confederación Sindical enfatizó que estrechamos lazos entre el mundo de la cultura y el mundo del trabajo. “Estamos en una disputa histórica en el que se redefine el modelo de sociedad para las próximas décadas”. Además, se afronta en un momento decisivo para dar carpetazo a la reforma laboral de 2012, responsable de los bloqueos de la negociación colectiva y de los convenios colectivos.

Como broche final, con todo el Filarmónica en pie, y, como dice la canción “millones de puños gritan”, se entonó el Asturias de Víctor Manuel con letra de Pedro Garfías.