¿Qué pasa con el absentismo?

  • Tribuna de José Manuel Zapico, secretario general de CCOO de Asturias, en "El Comercio"

29/06/2025.
Tribuna sobre absentismo

Tribuna sobre absentismo

Cuando se dice, sin más, que hay miles de personas que faltan cada día a su trabajo, convendría dejar claro de qué estamos hablando. Porque esas personas pueden estar de vacaciones, disfrutando de un permiso de maternidad o paternidad, o encontrarse de baja por enfermedad… contraída precisamente en el trabajo. Todo ello, la patronal lo considera absentismo, aunque en realidad son derechos.

Hay ausencias justificadas, que no deberían considerarse absentismo para evitar confusiones, y ausencias injustificadas, que es cuando una persona no acude a su puesto de trabajo de forma voluntaria o se ausenta sin aviso, que sí se debe denominar absentismo, pero que resulta ser, en términos estadísticos, anecdótico. Es decir, en la inmensa mayoría de los casos, la gente no acude al trabajo porque está ejerciendo un derecho legalmente protegido. 

Las cifras de la siniestralidad laboral son verdaderamente escandalosas, y el registro de enfermedades profesionales no incluye ni mucho menos todas las que debería.

Las empresas se quejan de que la gente falta demasiado al trabajo por enfermedad cuando muchas patologías tienen un origen laboral, pero se siguen catalogando como enfermedades comunes. Además del fraude que significa derivar al Sistema Público de Salud los daños de origen laboral, evita también que las empresas adopten medidas para combatir y resolver los problemas de salud que se originan en los centros de trabajo. 

Un reciente informe de CCOO subraya que el principal problema de las enfermedades de origen laboral sigue siendo su subregistro. El caso más escandaloso es el del cáncer laboral: el pasado año en nuestro país solo se registraron 106 partes cuando se estiman en más de 16.000 los nuevos casos anuales y más de 6.000 muertes por este motivo. El Gobierno ha de crear un registro de personas trabajadoras expuestas a agentes cancerígenos. 

Las ausencias justificadas tienen una relación directa con las condiciones laborales. Muchas personas, como destaca el informe del ministerio de Trabajo sobre precariedad y salud mental, se ven empujadas a aceptar y soportar trabajos con condiciones nocivas, cuando no altamente tóxicas. 

El aumento de los trastornos mentales tiene mucho que ver con la precariedad. La primera causa de la siniestralidad laboral ya son las patologías no traumáticas, como ictus o infartos; hay una estrecha relación con las condiciones de trabajo, jornadas interminables, horarios imposibles, cargas inasumibles, estrés, estilos de mando autoritarios, imposibilidad para tener una desconexión...

Exigimos revisar el cuadro de enfermedades profesionales para actualizarlo e incorporar patologías relacionadas con los riesgos psicosociales, y legislar de manera particular para su prevención. La reducción de jornada sería una medida de gran calado para la prevención de los riesgos psicosociales, y que beneficiaría particularmente a las mujeres.

La patronal insiste también en que las mutuas -entidades privadas formadas por asociaciones de empresarios- deberían tener más protagonismo en la gestión de la incapacidad temporal de las personas trabajadoras. En nuestro país contamos con una legislación garantista y un sistema de salud que funciona con profesionalidad. Y es el personal médico de la Seguridad Social el que decide finalmente si alguien está en condiciones o no de trabajar. 

El propósito de la patronal de hacerse con el control de las bajas a través de las mutuas solo puede esconder un interés mercantil, el de hacer negocio con la salud de las personas trabajadoras. 

Los objetivos prioritarios de las mutuas son y deberían ser la prevención de riesgos laborales y la reparación de daños ocasionados por el trabajo frente al control de los costes económicos y la mejora de la competitividad de las empresas. 

Lo que deberían hacer las empresas es mejorar las condiciones laborales para que las personas no enfermen ni se dejen la vida en el trabajo. 

Como sindicato más representativo, CCOO está implicado desde hace mucho tiempo en la defensa de la salud y la seguridad laboral, y por eso hemos propuesto en el seno de la concertación una mesa específica para abordar este tema, con seriedad y rigor. Como merece.